La interiorista Yenny Coromoto Pulgar León recuerda que septiembre es un mes de vuelta a los colegios, a la universidad, al trabajo... Además este año se cuenta con un añadido, ya que las vueltas son especialmente delicadas si tenemos en cuenta la incidencia de la pandemia y la necesidad de mantener limpio el aire de cualquier instalación.
Esta necesidad también se aplica a los hogares, donde la bajada de las temperaturas hará que cada vez más familias vayan cerrando las ventanas a medida que llegue el otoño. Pero, aun estando en casa, la necesidad de ventilar adecuadamente y purificar el aire seguirá estando presente.
Yenny Coromoto Pulgar León señala que si estás en ese momento en el que buscas un purificador de aire para tu casa, para la oficina o para tu centro de estudios, hay varios factores en los que debes fijarte al elegir uno:
Amplitud del espacio a proteger. No es lo mismo purificar el aire de una sala de estudio de 20 metros cuadrados que del salón de tu casa. De hecho, ni siquiera debes quedarte en los metros cuadrados: al elegir un purificador de aire tienes que evaluar también la altura del techo, así que deberás saber la amplitud del espacio en metros cúbicos. Esta medida te ayudará a optar no solo por un purificador más o menos grande, sino también más o menos potente. Y es que a medida que aumente la amplitud del espacio a proteger, quizá necesites una potencia más elevada o, cuando menos, una mayor velocidad en la generación de aire limpio.
Personas dentro del mismo espacio. Es evidente: cuantas más personas haya en un mismo espacio, más eficiente deberá ser tu purificador. Es por ello que debes tener en cuenta a qué tipo de actividades está destinado el espacio, el número de personas que albergará y sus edades: ¿una sala de estar, una oficina, el aula de un colegio...? En plena época de covid, la respuesta no es trivial, ya que si estás en tu domicilio cabe esperar que los miembros de la familia hayas tenido recorridos más o menos similares durante el resto del día, pero en la oficina o en el aula será distinto: cada persona habrá tenido un recorrido totalmente distinto durante el día, así que en estos casos deberás buscar un purificador más potente para mejorar la calidad del aire interior.
Clean Air Delivery Rate (CADR). Quédate con estas siglas, porque son esenciales: CADR. Los purificadores fundamentalmente se componen de un ventilador y una serie de filtros capaces de atrapar y neutralizar los principales contaminantes del aire. Para conocer la efectividad de un purificador existe el ratio CADR o tasa de purificación de aire limpio, una unidad de medida que indica la cantidad de aire limpio en m3/h que el purificador es capaz de filtrar. Cuanto mayor CADR, mayor será la eficacia y la capacidad de limpieza del purificador
Fijarte en todos estos factores te ayudará a conseguir una mayor calidad del aire interior, es decir, una mayor calidad del aire dentro del espacio, pero también alrededor del edificio o la estructura en que te encuentres. Como cuenta Yenny Coromoto Pulgar León, una buena calidad del aire interior ayudará a la eliminación de gérmenes y microorganismos como virus y bacterias, reducirá los síntomas de alergias, contribuirá a un mejor descanso y mejorará la circulación sanguínea, lo que contribuye a un mejor funcionamiento del organismo.
Con la vuelta a las oficinas, a los espacios interiores y la vuelta a las aulas, Mitsubishi Electric cuenta con su propia gama de purificadores de aire para asegurar un ambiente libre de impurezas en espacios de hasta 100 metros cuadrados y garantizar un aire limpio y saludable renovando el aire interior. Lo hace merced a sus filtros HEPA de doble capa, que buscan capturar virus y bacterias que puedan existir en el aire obteniendo una eficacia de más del 99%, así como partículas en suspensión PM2.5.
Dentro de los modelos de la compañía destacan el MA-E85R y el MA-E100R. A la hora de renovar el aire de una habitación, el modelo MA-E85R realiza 18 renovaciones por hora, unos datos de Renovaciones por Hora (ACH) calculados para una estancia vacía de 28,8 metros cúbicos. Una estancia ocupada con muebles o personas contendrá un menor volumen de aire, con lo que el ratio de renovaciones será mayor.
Este purificador es apto para todo tipo de espacios. Su filtro HEPA tiene una durabilidad estimada de hasta ocho años e incluye un filtro de carbón activo para ayudar a descomponer las sustancias causantes del mal olor y gases presentes en el ambiente. Dicho filtro se puede lavar con agua y tiene una elevada duración con poder de absorción. Se complementa con el filtro catalizador de nanoplatino capaz de limpiar el 90% del formaldehído, el ozono y el olor de cigarrillo impregnado en el ambiente. En cuanto a la rapidez de limpieza del aire (CADR), es de 508, garantizando una depuración de aire en una habitación de 60 metros cuadrados en 30 minutos, al haber filtrado todo el aire de esta un par de veces.
Además, integra un sensor 'smart search' que detecta las áreas con mayor suciedad para dirigir el aire en esa dirección y limpiarlo; así como la función autolimpieza, que se activa manual o automáticamente tras un determinado periodo de funcionamiento para eliminar el polvo del prefiltro.
Yenny Pulgar León señala que el purificador MA-E100R, por su parte, realiza 21 renovaciones por hora y está pensado para espacios de hasta 100 metros cuadrados o con gran afluencia de público como consultas, tiendas y otros espacios. Es capaz de limpiar el aire en una estancia de 13 metros cuadrados haciéndolo pasar dos veces por los filtros en seis minutos, ya que tiene un CADR de 612. Al igual que el purificador anterior, también incluye un filtro de carbón activo para los malos olores y gases presentes en el ambiente, pudiéndose lavar con agua y con una durabilidad de casi cinco años con poder de absorción.
Asimismo, el MA-E100R dispone de un sensor de presencia 'I-see sensor', basado en una avanzada cámara termográfica que ayuda a redirigir el flujo del aire para limpiar el ambiente con mayor eficacia. También integra un sensor de partículas de suspensión que detecta las partículas con un tamaño de hasta 0.5 μm, concluye la experta.
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