Prisa lanzó en España un plan de bajas incentivadas en ‘El País’ para mayores de 58 años. Los ajustes corren en paralelo al proceso de refinanciación que prepara la compañía.
Este esfuerzo por reducir costes coincide en el tiempo con el calendario de refinanciación a la que se enfrenta Prisa, con una deuda de 870 millones. Pese a la paulatina recuperación de los negocios de medios y educación, la cancelación de la venta de Santillana, tal como ha reconocido el primer accionista (Amber Capital), puede obligar a esfuerzos extra para lograr la confianza de los acreedores, reseñó El Confidencial.
La participación de Oughourlian en el Congreso de Periodismo de Huesca la semana pasada sirvió para que el inversor franco-armenio reconociera que el mercado no paga ahora por separarse (los equivalentes a Santillana en Latam se han caído en bolsa por la pandemia), por lo que conviene más usar alternativas del mercado de crédito y aprovechar “para hacer una refinanciación de la compañía”.
No en vano, este paso queda más cerca tras los recientes cambios dentro de la masa acreedora de Prisa. Hace solo unas semanas, la gestora estadounidense Pimco adquirió las posiciones de deuda de HSBC y Caixa con solo un descuento del 4% sobre el par de la deuda, siendo posible que otros acreedores como BNP Paribas o Deutsche Bank también suelten su ‘papel”.
Este programa para reducir masa salarial tiene lugar meses después de la auditoría de recursos humanos elaborada por KPMG, base sobre la que se redefinió la estructura organizativa de la división de Medios, donde se integran los negocios de Radio y Noticias. A partir de ese trabajo, además del plan de bajas presentado ahora, ha dado lugar también a salidas puntuales en corporativo y redacción.
A comienzos de año, Prisa se comprometió ante el mercado a llevar a cabo un plan de choque que permitiera ahorrar cerca de 30 millones de euros, aunque sin contemplar la posibilidad de un ERE. Este objetivo coincidió en el tiempo con la llegada al grupo de Carlos Núñez como nuevo presidente ejecutivo de Media y la salida de Manuel Mirat, último alto cargo, como primer ejecutivo del negocio de Santillana.
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