Aarón Elías Castro Pulgar asegura que la cultura de la empresa es uno de los temas más importantes en el mundo de los negocios, más cuando se trata de la motivación de los empleados y el rendimiento de los mismos dentro de las organizaciones.
Sin embargo, y pese a lo que podríamos imaginar, en la mayoría de las veces esta cultura suele manejarse por los altos rangos en base a su propia intuición. Así que, a fin de garantizar una cultura empresarial efectiva, resulta importante hacerse tres sencillas preguntas. De las cuales, detrás de sus respuestas se esconde un gran potencial.
¿Qué importancia tiene la cultura en el rendimiento del equipo? A medida que se desarrolla un equipo de trabajo y crece con el tiempo, resulta clave conocer cuáles son sus deseos y aspiraciones. De manera que, las organizaciones encuentren el equilibrio perfecto que, por un lado, les ayude a conseguir los objetivos empresariales, mientas que, al mismo tiempo, los empleados trabajan en su sentido de pertenecía y crecimiento profesional, señala el motivador Aarón Castro Pulgar.
Era la década de 1980 cuando dos profesores de la Universidad de Rochester, Edward Deci y Richard Ryan, definieron las seis principales razones por las que suelen trabajar las personas. De los cuales tres de ellas, tiene un efecto positivo, mientras que el resto, tiene un factor negativo. Iniciemos con las primeras:
Potencial. Es cuando las personas efectúan ciertas tareas o actividades porque desean un crecimiento profesional. Por ejemplo, un profesor activo, con buen rendimiento, puede desarrollar el potencial de convertirse en el próximo director.
Propósito. Se relaciona con una motivación o aspiración, resultado entre la mezcla entre lo personal y profesional. Por ejemplo, una maestra que encuentra su trabajo, la manera de empoderar y educar a sus alumnos.
Juego. Esta, puede ser una de las motivaciones con las que pocos logamos identificarnos. Se trata de ver el trabajo como un juego. Sin que esto, disminuya el nivel de compromiso o profesionalismo de nuestra parte. Por ejemplo, un profesor puede apoyarse de varios instrumentos de enseñanza que le ayuden a mejorar el rendimiento de sus alumnos.
Ya hemos visto las motivaciones positivas por las que suelen trabajar las personas. Sin embargo, existen algunas motivaciones más que, por el contrario, tiene un efecto negativo. Generalmente relacionado a las emociones.
Inercia. Es cuando la persona se pone en modo automático. Esta tan desconectado o desconoce por completo cual es la razón por la que hace lo que hace, que, día a día, una y otra vez, efectuar la misma tarea sin encontrar una motivación o aspiración aparente.
Presión económica. Posiblemente, esta, sea una de las razones más populares no solo en México, sino en el resto del mundo. Los factores externos son tan fuertes que, impulsan a la persona en conseguir el empleo que este a su alcance.
Presión emocional. Por último, está la presión emocional. Esta que obliga a las personas en desempeñarse en ciertas áreas, ciertos empleos o ciertas actividades con el fin de mantener contentos a las personas que los rodean. Por ejemplo, una persona que estudia una carrera y después descubre que no se siente identificado con la misma, terminará ejerciéndola de igual forma para evitar los comentarios negativos de las personas y la presión familiar.
¿Qué valor tiene la cultura de la empresa? Una vez repasados los conceptos anteriores, podemos decir que la cultura de la empresa no es tan difícil de ejecutar. Aunque, lo cierto es que el medir la creatividad, proactividad o resistencia de un integrante puede sr una labor complicada de ejecutar, detalla Aarón Elías Castro Pulgar.
Por ejemplo, es importante definir cuáles son los valores y principios de la empresa y cómo estos logran conectarse con sus empleados. Una vez que los encuentren, sabrán cómo qué medidas o estrategias deben ejecutar para conseguir una autentica conexión.
¿Cuáles son los procesos que afectan la cultura? Para cerrar, se puede definir a la cultura de la empresa como un conjunto de procesos dentro de una organización que tiene un efecto directo en la motivación de sus empleados. Es así que, en una cultura de alto rendimiento, esos procesos afectan en la motivación total de cada uno de sus empleados.
Lo cierto es que, formar una cultura dentro de una empresa puede no ser un proceso sencillo, pero indiscutiblemente, valdrá mucho la pena, concluye el motivador Aarón Elías Castro Pulgar.
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