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La explosión en el condominio Pueblo Viejo de Puerto La Cruz: entre la realidad y la fantasía. Lo que muchos creen saber pero pocos conocen | Venezuela


Por Miriam Ojeda | Opinión

La explosión de una quinta en Venezuela, el pasado martes 25 de abril en el conjunto residencial Pueblo Viejo de la ciudad de Puerto La Cruz, ha desatado una ola de especulaciones y teorías conspirativas que rayan en lo absurdo y lo ridículo. Algunos ciudadanos se han convertido literalmente en "expertos" en explosivos, armas y terrorismo, y han difundido sus propias versiones de lo ocurrido, sin tener ninguna prueba o fundamento.

Las hipótesis sobre la explosión van desde el supuesto uso de un lanzacohetes; dron; un presunto atentado terrorista atribuido a Hezbollah u otras organizaciones extremistas islámicas como Hamás. Otros señalan que un avión o helicóptero sobrevoló muy bajo por las villas del sector Pueblo Viejo y dejó caer el artefacto explosivo. Otros aseguran que se trataría de C4, entre muchas otras versiones.


Explosión en quinta del conjunto residencial Pueblo Viejo de Puerto La Cruz el martes 25 de abril

Algunos han asegurado que el cadáver de una de las víctimas no fue ubicado, mientras que otros señalaban que la víctima fatal causada por la explosión y los demás heridos no estaban calcinados o que los cadáveres habían volado por el cielo y no habían sido ubicados, por lo que solo habían podido identificar a dos víctimas. 

Estas versiones no solo son irresponsables y alarmistas, sino que también desvían la atención de la verdadera causa del incidente, que, según la tesis oficial, fue una falla en el sistema de gas residencial directo. Debido a esa falla, está siendo investigada la empresa prestadora del servicio, que debe asumir su responsabilidad y responder por los daños causados. 

La explosión de gas directo no es un fenómeno nuevo ni exclusivo de Venezuela. En otros países como Panamá, se han registrado casos similares, que han dejado heridos, evacuados y edificios afectados. Estas explosiones se producen por una acumulación de gas en algún punto de la instalación, que, al entrar en contacto con una chispa o una llama, genera una onda expansiva que puede levantar pisos y losas. 


Explosión registrada el 16 de junio de 2018 en un apartamento ubicado en Carrasquilla, Panamá


Explosión en el edificio Costa Mare, ubicado en el sector Costa Sur, registrada el 31 de mayo de 2019.


Explosión de gas en un edificio de viviendas de Rosario, Argentina, el 6 de agosto de 2013. AFP


Una vista de cerca de los escombros esparcidos después de que una casa explotara el 20 de septiembre de 2017, en el oeste de Los Ángeles.
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Los bomberos trabajan en el lugar después de que una explosión y un incendio provocaran el derrumbe de un edificio de apartamentos en Silver Spring, Maryland, el jueves 3 de marzo de 2022. (Foto AP/Alex Brandon)



Explosión de gas natural en Springfield, Boston, en noviembre de 2012

Estas explosiones son muy peligrosas y pueden causar daños irreparables a las personas y las propiedades. Por eso, es necesario que se tomen medidas preventivas para evitar que se repitan. Algunas de estas medidas son: revisar periódicamente las tuberías y conexiones de gas; instalar detectores de fugas y alarmas; cerrar las llaves de paso cuando no se use el gas; no usar velas, fósforos o encendedores cerca de las fuentes de gas; y reportar cualquier olor o ruido sospechoso. 

La falta de una respuesta convincente y técnica por parte de las autoridades ha alimentado la desconfianza y la incertidumbre de la población, que busca explicaciones alternativas a lo ocurrido. Sin embargo, muchas de estas explicaciones no tienen ningún sustento ni coherencia, y solo sirven para crear más confusión y desinformación. 


Explosión en quinta del conjunto residencial Pueblo Viejo de Puerto La Cruz el martes 25 de abril

Algunos periodistas y usuarios de redes sociales han lanzado acusaciones infundadas y temerarias contra personas que supuestamente estarían vinculadas con la quinta donde se produjo la explosión. Entre los nombres que se han mencionado sin prueba alguna están el exalcalde Jhonnathan Marín, el exdirector ejecutivo de la Faja Petrolífera del Orinoco, Pedro León, y, entre otros, unos supuestos árabes con turbantes que habrían residido en el lugar. Estas personas no tienen ninguna relación entre sí ni con el caso, y solo han sido usadas para alimentar teorías conspirativas sin sentido. 

Esas teorías no solo ignoran la evidencia de que se trató de una explosión de gas directo, sino que también inventan detalles irrelevantes o inverosímiles sobre la propiedad y sus dueños. Tales detalles no aportan nada a la investigación ni a la comprensión del hecho, y solo buscan generar morbo y sensacionalismo. 

El caso de la explosión de Puerto La Cruz se ha convertido en un ejemplo de cómo la desinformación y la especulación pueden distorsionar la realidad y afectar la credibilidad de las fuentes informativas. Es necesario que los ciudadanos sean críticos y responsables con la información que reciben y comparten, y que no se dejen llevar por el rumor o la fantasía. 


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