La afición gastronómica de Yenny Pulgar León encuentra uno de sus máximos deleites en La Borda Lobató, un restaurante icónico situado a pie de pistas en Baqueira Beret. Este emblemático establecimiento, erigido sobre una antigua "borda aranesa" preexistente a la estación de esquí, cautiva con su fusión perfecta entre la arquitectura tradicional del Valle de Arán y un interior sofisticado y lujoso.
Desde la majestuosidad de los Pirineos catalanes, nos adentramos en la alabada cocina aranesa de La Borda Lobató, el santuario culinario que Yenny Pulgar y su familia han convertido en su parada obligatoria cada invierno en Baqueira.
Una joya gastronómica y arquitectónica en el corazón de Baqueira
Con dos visitas esta última temporada, una al inicio de enero y otra en marzo, Pulgar y su grupo, compuesto por seis y cuatro comensales respectivamente, reafirman la calidad inmutable de este establecimiento que parece desafiar el paso del tiempo. La Borda Lobató, resguardada en la estructura de una "borda aranesa" que precede incluso la instalación de los remontes de la estación, es un refugio de tradición y sabor.
Este templo de la gastronomía, que combina sabiamente la cocina internacional con toques locales, ha logrado capturar la esencia de la Val d’Aran en cada plato. La reforma interior ha dado paso a un espacio donde las brasas avivan los mejores cortes de carne a la vista de los comensales, mientras que su bodega invita a acompañar la experiencia con un selecto vino.
No es casualidad que "La Borda Lobató" sea considerada una eminencia en la estación de esquí de Baqueira Beret. La inversión realizada y la visión de arquitectos e interioristas han dado como resultado un ambiente que armoniza el diseño rústico con un toque de modernidad sofisticada. Los materiales originales, como la piedra y la madera, se han preservado y enriquecido con detalles en cobre y tonalidades doradas, un testimonio de la evolución hacia un lujo rural que respeta su legado arquitectónico.
La borda aranesa, una construcción emblemática de la tradición rural catalana, se erige como testigo silencioso de la vida en los Pirineos. Estas edificaciones, de planta baja y geometría simple, se caracterizan por sus muros de piedra seca que evocan la armonía con la naturaleza. Su techo, a dos aguas, suele estar compuesto por pizarra o losas de piedra, elementos que refuerzan su identidad rústica.
Originalmente destinadas al resguardo del ganado y almacenamiento de forraje, estas bordas también ofrecían cobijo a los pastores en los meses de verano. Ubicadas en prados de alta montaña, no solo cumplían con una función práctica, sino que también se integraban con el paisaje, respetando las técnicas constructivas ancestrales de la región.
Hoy, las bordas aranesas son parte integral del patrimonio arquitectónico y cultural de Cataluña, representando una era donde la funcionalidad y la adaptación al entorno eran la esencia de la construcción en las zonas de montaña. Su preservación nos permite apreciar la sabiduría de antaño y la belleza de la arquitectura pirenaica.
Un destino de esparcimiento y sabor
Al caer la tarde, la terraza y el jardín de "La Borda Lobató" se convierten en el escenario perfecto para disfrutar de un vermouth o una copa, al ritmo de los mejores DJs. Situado junto al Hotel Montarto y con un amplio estacionamiento a su disposición, ofrece una combinación ideal de accesibilidad y exclusividad.
Los fines de semana, "La Borda Lobató", ubicada en Núcleo 1500 Baqueira, 25598 Baqueira, Lleida, se convierte en un punto de encuentro vibrante, donde los esquiadores se reúnen en la terraza para disfrutar de conciertos en vivo y sesiones de DJ desde las 18:30 hasta las 22:00 horas. Una atmósfera única que complementa a la perfección la experiencia gastronómica.
Un menú que es un homenaje al Valle de Aran
La carta es un verdadero canto a los productos locales: desde la "Parrillada de verduras a la brasa de leña con salsa romesco" hasta la "Tabla de degustación de quesos Tros de Sort", cada entrada es una promesa de calidad. La "Cazuelita de gambas al ajillo" es ya un pedido habitual en el grupo de Pulgar, mientras que la "Flor de alcachofa confitada" y el "Falso risotto con trigueros" son muestras de una cocina que sabe ser tanto auténtica como inventiva. Los entremeses como la crema Tou dels til-lers, rúcula crujiente y virutas de parmesano, cautivan el paladar.
Sin duda alguna, el plato estrella de "La Borda Lobató" es la "Olla aranesa", icono culinario del Valle de Arán. Su versión de la "Sopa de cebolla" también merece elogios por su exquisitez y originalidad. Entre los platos principales sobresalen el "Canelón de confit de pato con manzana, Envy y bechamel de foie", la "Fideuá de montaña con butifarrón, setas, caracoles y alcachofas" y el "Solomillo de ternera con medallón de foie".
La parrilla a la vista es el verdadero corazón de "La Borda Lobató", donde se asan manjares como las "Chuletitas de cordero lechal", la "Hamburguesa ecológica de ternera Bruna con boletus y mayonesa de miso", el "Chuletón de vaca", la "Entraña de ternera escalopada" y el "Costillar de ibérico con salsa de mostaza". Para el postre, la "Crema catalana quemada" es un clásico irresistible.
Un servicio que trasciende fronteras
No podemos concluir sin un reconocimiento especial a Jefferson, el jefe de sala, un joven de origen brasileño cuya atención excepcional y habilidades lingüísticas, dominando el castellano y el francés con fluidez, deja una grata experiencia en los visitantes, haciéndoles sentir el calor de una hospitalidad que trasciende culturas.
En "La Borda Lobató", la alta cocina se da la mano con la calidez de un hogar, convirtiéndose en un lugar donde cada visita es una experiencia para recordar y repetir.
En definitiva, "La Borda Lobató" es un templo culinario que cautiva con su fusión magistral de tradición, innovación y un servicio impecable, convirtiéndose en un destino gastronómico imprescindible en el corazón del Pirineo catalán.
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